Critica de danza por Ana soylogopeda@hotmail.com
"A las nueve y media de la noche ya empezaba a llegar gente para coger buen sitio, tod@s llegaban ansios@s y a la vez curios@s por ver a Özgen. En poco tiempo el recinto estaba repleto de personas que venían a ver el espectáculo con grandes expectativas. A pesar de que el escenario no era muy grande, las actuaciones tuvieron animado al público y nos hicieron vibrar de emoción; y nunca mejor dicho en el caso de Özgen, que nos deleitó con sus shimmys impresionantes.
Quedó bien claro que la danza oriental la pueden practicar también los hombres y con muy buenos resultados, y fue una buena oportunidad para aproximarse un poco más al estilo turco Rom. Hubo momentos que dejaron a los asistentes asombrados y que a la vez arrancaron sus sonrisas; por ejemplo, cuando el bailarín tiró la chaqueta al suelo y bailó sobre ella, cuando introdujo su zapato entre el pantalón y su barriga o cuando bajó del escenario para acercarse al público.
Pero ahí no quedó la cosa porque hubo más. Las actuaciones de Flor de Henna se caracterizaron por la buena sincronización de las bailarinas, su gran capacidad de conexión con el público y por sus trajes vistosos.
Las componentes de Sueño Oriental transmitieron fuerza, energía y sensualidad a la vez, haciendo que los asistentes estuvieran completamente entregados aplaudiendo al compás.
Las Dakini nos deleitaron con un coreografía con velo muy vistosa. Dersa protagonizó dos actuaciones en las que derrochaba sensualidad y nos mostró su habilidad con el velo.
Y por último, Aida bailó en solitario haciendo que el público enmudeciera durante la actuación, nos transmitió su buena energía y nos regaló unos shimmys impresionantes."
"A las nueve y media de la noche ya empezaba a llegar gente para coger buen sitio, tod@s llegaban ansios@s y a la vez curios@s por ver a Özgen. En poco tiempo el recinto estaba repleto de personas que venían a ver el espectáculo con grandes expectativas. A pesar de que el escenario no era muy grande, las actuaciones tuvieron animado al público y nos hicieron vibrar de emoción; y nunca mejor dicho en el caso de Özgen, que nos deleitó con sus shimmys impresionantes.
Quedó bien claro que la danza oriental la pueden practicar también los hombres y con muy buenos resultados, y fue una buena oportunidad para aproximarse un poco más al estilo turco Rom. Hubo momentos que dejaron a los asistentes asombrados y que a la vez arrancaron sus sonrisas; por ejemplo, cuando el bailarín tiró la chaqueta al suelo y bailó sobre ella, cuando introdujo su zapato entre el pantalón y su barriga o cuando bajó del escenario para acercarse al público.
Pero ahí no quedó la cosa porque hubo más. Las actuaciones de Flor de Henna se caracterizaron por la buena sincronización de las bailarinas, su gran capacidad de conexión con el público y por sus trajes vistosos.
Las componentes de Sueño Oriental transmitieron fuerza, energía y sensualidad a la vez, haciendo que los asistentes estuvieran completamente entregados aplaudiendo al compás.
Las Dakini nos deleitaron con un coreografía con velo muy vistosa. Dersa protagonizó dos actuaciones en las que derrochaba sensualidad y nos mostró su habilidad con el velo.
Y por último, Aida bailó en solitario haciendo que el público enmudeciera durante la actuación, nos transmitió su buena energía y nos regaló unos shimmys impresionantes."
Aunque no soy ni mucho menos una entendida, quiero transmitir en la medida de lo posible mi agradecimiento a tod@s l@s participantes de Shakshuka por acercarnos a la danza oriental y por poner toda su buena fe en ofrecer un buen espectáculo. Espero poder seguir disfrutando de próximas actuaciones, porque me he quedado con ganas de más. Enhorabuena y hasta siempre.
