Esta semana de agosto, fuí con unas coleguitas a un espectáculo de danza contemporánea homenaje al cantante de rumba Gato Pérez. Lo organizaba la escuela La Caldera dentro de las famosas Fiestas de Gràcia (un barrio de Barcelona). El lugar era la terraza de la magnífica escuela (una antigua fábrica), y se llamaba algo así como "Gatos que bailan por los tejados", jugando con el nombre del músico.
Profesores de la escuela y bailarines famosos como Toni Mira actuaron junto con alumnos de un taller de "Danza para todos". La famosa Sol Picó estaba anunciada, pero al final llegamos a la conclusión que no bailó, sino que pusieron a una doble (!!?)
Fué una actividad muy refrescante, después de hacer una hora de cola y por poco quedarnos sin entrada, la lucha mereció la pena(es que era gratis...).
Un bailarín vestido de ángel bailó en el techo de unos lavaderos, el grupo de "Danza para todos" en la terraza de un convento de unas monjitas (en la que ellas mismas sin quererlo formaron parte del espectáculo y fueron muy entusiastas), y en el balcón de un segundo o tercer piso la pareja que se suponía era Sol Picó y Toni Mira tendiendo "calsonsillos" acabaron con un beso pasional bajo la atenta mirada de la pareja de abuelillos dueños del piso.
Todo esto fué con música en directo recordando los temas del homenajeado y haciéndonos bailar varias canciones, haciendo protagonista al público. Los bailarines después de actuar vinieron a la terraza donde estabamos y se mezclaron bailando con nosotros. Es en este momento cuando nos dimos cuenta de que "Sol Picó" estaba más guapa, más hermosa, "más mujer". Clavaíta a ella, pero con menos músculos y una expresión algo diferente que nos dió que pensar. En el programa de mano vimos que no salía, así que no era ella. No pasa nada, fué todo estupendo igualmente.
Actividades así son de agradecer, y más sin son gratuítas. Nena, la que sabe se aprovecha!!!
